Estoy profundamente decepcionado con esta Italia. Es cierto que no me convencía el bloque de Lippi pero ni se me pasaba por la cabeza que pudieran tropezar ante Nueva Zelanda. Pero lo peor no fue el resultado, que ya es la mayor sorpresa del torneo, sino la imagen que dejó la 'azzurra'. Incapaces de generar fútbol sólo pudieron llevar peligro con disparos lejanos y centros laterales, nada de acciones por asociación.
El técnico repetía once con el único cambio obligado de Marchetti por el lesionado Buffon. Sin embargo, había modificación de sistema y Lippi optaba por el que utilizó en el segundo tiempo ante Paraguay. Iaquinta pasaba a jugar arriba junto a Gilardino y Marchisio pasaba al interior izquierdo, zona donde se puede amoldar más que a la de la mediapunta.
A los transalpinos les volvieron a meter un gol a balón parado, una de las mejores armas que tienen los neozelandeses. Un centro de Bertos era peinado por Reid y Smeltz, en fuera de juego, aprovechaba el error de Cannavaro para adelantar a los 'all whites'. Italia sólo fue capaz de empatar de penalty tras un discutible agarrón a De Rossi.
Las dudas que ya generaron en el debut se vieron acrecentadas y urgen cambios para el decisivo partido ante Eslovaquia. A la espera de Pirlo (como te echo de menos...), haría tres modificaciones muy claros. Camoranesi y Di Natale para entrar por bandas en lugar de Pepe y Iaquinta y, aunque me cueste reconocerlo, Gilardino no está y Pazzini es el nueve que más en forma ha terminado la temporada. De lo mejorcito hasta ahora están siendo los laterales Zambrotta y Criscito.
También quiero dedicarle un poquito de espacio a una Nueva Zelanda que nos está sorprendiendo a todos y que tiene una de las grandes apariciones del Mundial. El central Reid me está pareciendo fabuloso, con un juego aéreo imponente y sólo 21 años. Un jugador con una historia curiosa. Se fue a Dinamarca con diez años, debutó con la selección sub-21 danesa y tras clasificarse los oceánicos para Sudáfrica, él mismo se ofreció para vestir la camiseta 'kiwi' y no debutó hasta los partidos previos al torneo. En el Midtjylland deben andar frotándose las manos porque me parece que le vamos a ver pronto por Inglaterra.
El técnico repetía once con el único cambio obligado de Marchetti por el lesionado Buffon. Sin embargo, había modificación de sistema y Lippi optaba por el que utilizó en el segundo tiempo ante Paraguay. Iaquinta pasaba a jugar arriba junto a Gilardino y Marchisio pasaba al interior izquierdo, zona donde se puede amoldar más que a la de la mediapunta.
A los transalpinos les volvieron a meter un gol a balón parado, una de las mejores armas que tienen los neozelandeses. Un centro de Bertos era peinado por Reid y Smeltz, en fuera de juego, aprovechaba el error de Cannavaro para adelantar a los 'all whites'. Italia sólo fue capaz de empatar de penalty tras un discutible agarrón a De Rossi.
Las dudas que ya generaron en el debut se vieron acrecentadas y urgen cambios para el decisivo partido ante Eslovaquia. A la espera de Pirlo (como te echo de menos...), haría tres modificaciones muy claros. Camoranesi y Di Natale para entrar por bandas en lugar de Pepe y Iaquinta y, aunque me cueste reconocerlo, Gilardino no está y Pazzini es el nueve que más en forma ha terminado la temporada. De lo mejorcito hasta ahora están siendo los laterales Zambrotta y Criscito.
También quiero dedicarle un poquito de espacio a una Nueva Zelanda que nos está sorprendiendo a todos y que tiene una de las grandes apariciones del Mundial. El central Reid me está pareciendo fabuloso, con un juego aéreo imponente y sólo 21 años. Un jugador con una historia curiosa. Se fue a Dinamarca con diez años, debutó con la selección sub-21 danesa y tras clasificarse los oceánicos para Sudáfrica, él mismo se ofreció para vestir la camiseta 'kiwi' y no debutó hasta los partidos previos al torneo. En el Midtjylland deben andar frotándose las manos porque me parece que le vamos a ver pronto por Inglaterra.
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